10 de julio de 2014

¡Ven para acá! Gritó mientras yo intentaba escapar. ¡VEN! Segundo grito, más fuerte, más cerca. Me agarra del brazo fuertemente, intento soltarme, me tira hacia él y agarra mi pelo. ¡Papá me duele, papá, déjame, papá! Grito entre lágrimas mientras él no deja de escupirme palabras en la cara. ¡Déjame, me haces daño, déjame! Las lágrimas no dejan de caer. ¡Déjame te dije! Salgo corriendo, cierro mi puerta con toda la fuerza que puedo y le pongo el seguro. Lloro. Lloro y no puedo contenerme. Abrazo mi almohada y las lágrimas caen. ¡Abre la puerta! Escucho que gira la manilla violentamente, ¡abre te dije! No quiero, no quiero abrir, tengo miedo. ¡Abre o la tiro abajo! Me levanto de la cama, abro la puerta y me siento de nuevo en ella. Me grita, me escupe cosas que no quiero oír. Papá, déjame estudiar, tengo examen mañana. Papá, basta, tengo que estudiar. Ándate, ¡no te quiero ver! Me dejaste el brazo colorado, le digo. Dice unas cuantas cosas más y, yo mirando por la ventana, me entero de que se ha ido. Me levanto y cierro, una vez más, la puerta. Te odio. Agarro la tijera color verde esperanza, irónico, ¿no? Y la paso por mi brazo izquierdo, el mismo que él me tiró fuertemente. ¿Duele? Sí, mucho, pero no tanto como él me trató. Siento odio, dolor, odio, dolor, pero lo amo, es mi papá, ¿no? ¿Por qué me golpea, entonces? Yo lo amo, si es mi héroe, ¿no? ¿Por qué me hace tanto daño? Yo lo amo, pero tengo pena. Lloro. Lo amo, ¿por qué me trata así? Quizá algún día lo entienda.

4 comentarios:

  1. Que mal, pobre chica. Es una pena que aun haya gente así, que rabia
    un beso

    ResponderEliminar
  2. Jo, que texto más triste :c
    espero que no sea real.

    ResponderEliminar
  3. Qué pena que estas cosas ocurran en la realidad :/

    ResponderEliminar
  4. Es tu padre lo amas pero nadie te puede hacer daño NADIE ni tu misma amate piensa lo mucho que vales y los demás lo verán también no te lastimes adelante siempre adelante

    ResponderEliminar